Perteneciente al orden Lagomorfo, se diferencia de los roedores entre otras cosas por presentar una par de incisivos más. Son especies gregarias por lo que se recomienda no mantenerlos solos.
Dieta estrictamente herbívora, necesitan alimentos altamente fibrosos para el buen funcionamiento de su digestivo y un adecuado desgaste dental.
Dentro de la medicina preventiva se recomiendan las revisiones bianuales, vacunación frente a la mixomatosis y la enfermedad hemorrágica vírica, castración y revisión parasitológica de sus heces.
Los conejos, por su condición de animal presa, camuflan sus signos de enfermedad, por lo que si observas algún comportamiento anómalo, sobretodo alteración en la ingesta de comida o cambio en la formación de sus heces, acude con urgencia al veterinario.
A la hora de dar de comer a un conejo hay que seguir estas indicaciones:
- Agua: Parece obvio, pero a veces se pasa por alto. Vuestros conejos necesitan tener siempre agua disponible para poder beber cuando tengan sed. Beben una media de entre 50 y 150 mililitros por cada kilo de peso al día. Esto puede parecer una cantidad elevada, pero se irá reduciendo con la ingesta de hojas verdes (que lo veremos más adelante).
- Heno: El heno debe cubrir el 70% de la dieta de un conejo. Es su principal alimento y muy necesario para que su sistema digestivo funcione correctamente. En el mercado podéis encontrar heno de diferentes plantas, cada una con sus propias propiedades. Podéis dar al conejo el que más le guste siempre y cuando coma todo el heno que necesita.
- Hojas verdes: Sería lo siguiente en cuanto a importancia en su dieta. Debe cubrir el 20% de lo que come cada día. Los conejos son animales folívoros por lo que necesitan poder comer hojas verdes todos los días. Podéis darle rúcula, canónigos, endivias o cualquier otra cosa similar.
- Pienso: Aunque se suele pensar que esta es la base de la comida para conejos en realidad es lo menos importante dentro de la dieta. Les da el aporte de proteínas que necesitan, pero es algo bastante secundario. No debe ser más del 10% de lo que coman cada día. Además, nosotros os recomendamos que el pienso sólo esté formado por pellets y no por diferentes surtidos.